Bienes inmuebles o alquiler de vivienda: Este año la Agencia Tributaria tiene sus ojos puestos en este punto. Si eres propietario de un piso de alquiler turístico, deberás agregarlo en el borrador y tener la documentación correspondiente para cumplir con todos los requisitos legales al respecto. Si en los últimos meses has adquirido una propiedad, también debes informarlo.

De igual forma, debes revisar que la información respecto a capital mobiliario, ganancias o pérdidas patrimoniales sea la correcta. Recuerda que la imputación de rentas inmobiliarias puede ser motivo de conflicto. Valores relativamente pequeños pueden estar obligados a presentar declaración.

Movilidad:  Si tu trabajo implica desplazamientos temporales, traslados a otros países o gastos y dietas relacionadas con tu actividad, infórmate sobre cómo debes incluir estas particularidades en el borrador, ya que las rentas exceptuadas de gravamen puede implicar problemas por cuantía o aplicabilidad.

Donaciones: Si colaboras con entidades religiosas, entidades no gubernamentales dedicadas a causas sociales, o por ejemplo, haces donativos a colegios privados, no te olvides de incluirlo en el borrador, porque es uno de los puntos bajo la lupa de Hacienda, ya que no todas las donaciones generan deducciones.

Indemnizaciones: Algunas indemnizaciones por despido pueden llevar importantes ahorros fiscales.

Discapacidad: Según el grado de discapacidad se establecen exenciones. Asegúrate de certificar este apartado correctamente.

Que no te falte documentación: Este año la declaración de la renta tiene varias novedades, entre ellas, las operaciones con criptomonedas. No olvides incluirlo en el borrador, al igual que las pensiones en el extranjero o las subvenciones públicas que recibiste para tu proyecto.